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Espina bífida, una enfermedad congénita que ataca a la infancia

Es la segunda causa de discapacidad física en los niños alrededor del mundo, que es conocida como espina bífida, una malformación congénita que se produce cuando, durante el primer mes de gestación, la columna vertebral o el tubo neural del feto no cierra adecuadamente ni de forma completa.

Los días 21 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Espina Bífida, con el fin de concientizar sobre las medidas de prevención de esta enfermedad y propiciar la mayor inclusión de las personas que la padecen en la sociedad actual. Entre las consecuencias de nacer con espina bífida se encuentran desde algunas las dificultades motrices, hasta discapacidades mentales, que pueden ir de leves a severas.

Síntomas visibles

La publicación web de Clínica Mayo refiere tres tipos de esta malformación, la cual se produce alrededor de los primeros 28 días de vida del feto en gestación.

• Espina bífida oculta: parece que no está presente porque, básicamente, los nervios raquídeos no se ven afectados. "Sin embargo, a veces, se pueden ver los síntomas en la piel del recién nacido, por encima del pequeño orificio en la columna vertebral. Podrías ver un mechón de pelo, un pequeño hoyuelo o una marca de nacimiento. Algunas veces, estas marcas de la piel pueden ser síntomas de un problema de la médula espinal que se puede detectar con una resonancia magnética o una ecografía de la columna vertebral en el recién nacido", señala la publicación.

• Meningocele: en cambio es una forma de manifestación de la espina bífida que afecta, principalmente, el funcionamiento de la vejiga y los intestinos.

• Mielomeningocele: definitivamente la forma más grave de la enfermedad, ya que quien la presenta va a tener el canal espinal abierto permanentemente, incluidas las vértebras de la parte baja y media de la columna. Los bebés que tienen este tipo de espina bífida pueden tener problemas en el funcionamiento de la vejiga y el intestino, así como debilidad o falta de movimiento en las piernas. Los bebés pueden tener una acumulación de líquido en el cerebro o hidrocefalia que puede ejercer presión en el tejido del cerebro", reporta la web de Clínica Mayo.

Aunque no existen estadísticas a nivel mundial, solo en Estados Unidos nacen cerca de 1.500 niños al año con esta malformación. La ciencia médica refiere la importancia de que la madre consuma una dosis adecuada de ácido fólico durante el primer trimestre del embarazo, como medida de prevención de que ocurra la ausencia del cierre del tubo neural y posterior espina bífida en el bebé.

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